Ocurrió en la
biblioteca, yo tenía que estudiar, trabajar y muchas cosa más. Entonces
llegó con aire de no haber estudiado nada,se acercó hacia mí, pedía
ayuda, yo, cohibido, intenté ayudarla. Ella se acercaba a mí cada vez
más y entonces se acercó a mí oído y me lo dijo. Me dijo "¿me pudes
devolver el boli?"
Yo no sabía qué decir, pero acepté, había que estar loco para no hacerlo, era una oportunidad irrepetible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si te gusta este microrrelato vótalo. Sólo puedes votar uno por categoría (si votas más de uno sólo se considerará váido el primer voto).
Recuerda que para que tu voto sea válido tienes que hacer constar en el comentario tu nombre, curso y fecha de nacimiento.